Mitos y realidades del cáncer de pulmón

En el marco del Día Mundial de la Lucha contra el Cáncer de Pulmón, que se conmemora el 17 de noviembre, es fundamental destacar la importancia de la prevención y el diagnóstico diferenciado para lograr que cada paciente cuente con alternativas terapéuticas específicas, así como la desmitificación de la enfermedad.

El cáncer de pulmón es uno de los tipos de cáncer más prevalentes en todo el mundo y su incidencia es motivo de preocupación tanto a nivel global como en México. Según datos de Globocan 2020, el cáncer de pulmón se ubicó como el séptimo con mayor número de nuevos casos con un total de 7 mil 588, y el cuarto en número de muertes con 7 mil 100 pacientes.

La importancia en la investigación tiene un papel fundamental, por ello, Janssen, Grupo de Compañías Farmacéuticas de Johnson & Johnson, presentó este año en el Congreso de la Sociedad Europea de Oncología Médica un total de 19 estudios (17 resúmenes patrocinados por la empresa y dos estudios iniciados por investigadores), con nuevos datos y actualizaciones sobre varios tipos de cáncer, entre ellos, el cáncer de pulmón, destacando los esfuerzos pioneros de la compañía para transformar el tratamiento de tumores sólidos.

Mitos a vencer

En torno al cáncer de pulmón existen varios conceptos erróneos. “Por ello, es importante desmitificar estas creencias para fomentar una comprensión precisa de esta enfermedad”, indica Fanny Romero, directora institucional de la Asociación Respirando con Valor. Los mitos comunes sobre el cáncer de pulmón son:

Mito 1. Todos los tipos de cáncer de pulmón son iguales.

Realidad: Esta patología se divide en dos tipos, el cáncer de pulmón de células pequeñas y el cáncer de pulmón de células no pequeñas. Este último representa alrededor del 85% de los casos.

Mito 2: Todos los tipos de cáncer de pulmón se diagnostican de la misma manera.

Realidad: El diagnóstico no se realiza siempre igual, ya que se considera fundamental un enfoque diferenciado. Esto implica un perfilamiento molecular completo para identificar mutaciones genéticas específicas y otros impulsores moleculares.

Mito 3: Todos los tipos de cáncer de pulmón se tratan de la misma forma.

Realidad: Entendiendo que cada paciente es único y que las diferencias individuales en sus genes, entorno y estilos de vida también lo son, la forma de tratar su enfermedad también debe ser única. Dado que es una enfermedad compleja, la investigación especializada permite un diagnóstico más preciso a través de biomarcadores específicos3, los cuales identifican con exactitud el tipo de cáncer.

Mito 4: Los síntomas del cáncer de pulmón son siempre iguales y evidentes.

Realidad: Al principio, el cáncer de pulmón puede no presentar síntomas notables, lo que dificulta su detección temprana. Los principales síntomas como tos persistente, dificultad para respirar, dolor en el pecho, expectoración con sangre, cambios de voz, pérdida de peso y fatiga pueden variar de una persona a otra, y en algunos casos, pueden ser sutiles en las etapas iniciales de la enfermedad.

Mito 5: Solo las personas que fuman pueden desarrollar cáncer de pulmón.

Realidad: Aunque el tabaquismo es el factor de riesgo más significativo para el cáncer de pulmón, las personas que nunca han fumado también pueden desarrollar la enfermedad. La exposición al humo de segunda mano, la exposición a sustancias químicas carcinógenas en el lugar de trabajo y factores genéticos pueden aumentar el riesgo.

Mito 6: El cáncer de pulmón es siempre fatal.

Realidad: Aunque el cáncer de pulmón es una enfermedad seria y puede ser letal, no todos los casos son iguales. El pronóstico depende de varios factores, como el estadio en el momento del diagnóstico, el tipo de cáncer y de mutación y la respuesta al tratamiento.

Mito 7: Las mujeres no pueden desarrollar cáncer de pulmón.

Realidad: El cáncer de pulmón afecta tanto a hombres como a mujeres. Aunque es cierto que, en el pasado, el cáncer de pulmón solía ser más común en hombres, la incidencia actual en hombres es de 7.9% y en mujeres de 7.7%.

Con una experiencia de más de una década en el tratamiento de tumores sólidos, como el cáncer de pulmón, Janssen ha forjado un legado sólido en este campo terapéutico. La compañía continuará enfocándose en avanzar en las opciones de medicina de precisión para hombres y mujeres que sufren enfermedades impulsadas por biomarcadores y que tienen opciones de tratamiento dirigido limitadas.