Con una infancia llena de colores, formas y arte, Sergio Díaz, mejor conocido como “Bido Guuze” (que en zapoteco significa el Señor de los Pescadores), recuerda que tuvo la inquietud de pintar y usar su creatividad desde muy pequeño, tomando como musa al mar y la cosmovisión del Istmo de Tehuantepec, Oaxaca, su lugar de nacimiento y donde creció entre familia de pescadores.
“Mi obra tiene que ver con la cosmovisión del mundo zapoteca del Istmo de Tehuantepec, con personajes, incluso con la vida, la fiesta, la muerte, porque aquí la muerte representa un respeto, una tradición y una festividad como se destaca normalmente en México”.
Sus primeros pasos los dio en el arte urbano, tomó talleres en Oaxaca y en Ciudad de México donde fue perfeccionando su técnica y encontrando su propio lenguaje y su propuesta. “Quería experimentar, crear y tenía esa necesidad de aprender todo el tiempo”.
En Ciudad de México es donde más se desenvolvió y conoció las escuelas del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura donde tomó varios cursos independientes. Posteriormente, participó en exposiciones colectivas e individuales en México y el extranjero.
Su obra nació de escuchar a sus abuelos y a la gente, de observar su colorido entorno y de sus recuerdos de infancia, porque vivir en el Istmo de Tehuantepec es lo que más ha nutrido su trabajo. “También cuando realizo las series me enfoco en un tema específico como la arquitectura o la moda. Por ejemplo, he intervenido algunas prendas, utensilios y juguetes. Todo suma, incluso ver un atardecer también nutre mi obra y me motiva a crear”.
“Bido Guuze” es habitante de Juchitán, Oaxaca, lugar en el que funda el Foro Ecológico Juchiteco, creado para impartir actividades artísticas y culturales a niños, jóvenes y adultos residentes. Cuenta con estudio, taller y el foro ecológico desde donde busca crear conciencia ecológica y donde maestros de pintura y cerámica imparten talleres.
Entre sus planes están seguir buscando exposiciones, mover su obra en galerías “y llevar mi cultura al último rinconcito del mundo, es mi meta para que conozcan nuestra cultura a partir de mi arte, de mi visión, colorido y cosmovisión”.